viernes, 10 de febrero de 2012
Capitulo 1 MI INFIERNO
…6277, 6278, 6279… Llevaba no más de media hora caminando, no sabía exactamente qué hora era, puesto que me había olvidado del celular en casa, calculo que serían cerca de las 11 de la noche, las calles parecían solitarias a pesar de estar en una ciudad muy poblada, debió ser por que el cielo amenazaba con soltar su fuerza desquiciada, 6292, 6293,6294, no tenía ninguna prisa por llegar a casa, ¿para qué? Si todo seguiría igual, iba a llegar a escuchar lo de siempre, esos gritos que hasta hace poco perforaban mi existencia, que acababan por hacer que quisiera quitarme la vida… pero no lo haría, eso no arreglaría nada, quizá ellos no sintiesen lo suficiente para extrañarme, ¿qué diferencia abría en dejar de existir y seguir aquí?, 6321... La lluvia azoto con fuerza, no estaba muy lejos de casa, pero aun así no apresure el paso, seguí contando cada paso que daba hasta que llegue frente a esa puerta y escuche lo esperado, esos gritos que se escuchaban a pesar de la fuerte lluvia, me dirigí hacia el costado de la casa y entre por la ventana, me senté en la cama mientras escuchaba aquellos gritos, no sabía porque discutían esta vez, pero tampoco quería saberlo, sumida en mis pensamientos me recosté en la cama y pasados unos minutos me pesaron los ojos y solo los cerré.
5 de Diciembre, 2012, 6:50 am
Un ruido me despertó, oí el arranque del carro de papá, me levante sintiéndome adolorida, moví la cabeza hacia los lados tratando de calmar el dolor del cuello, era de esperarse, había dormido con la ropa mojada, fui hacia el baño para tomar una ducha, el agua no estaba mal, así que entre en la regadera tratando de relajarme, trataba de recordar que día era, no estaba segura, pero sabía que no era fin de semana, así que tenía que asistir al colegio, puedo asegurar que en el colegio las cosas no mejoraban, salí de la ducha en ropa interior, caminaba descalza mientras secaba mi cabello, termine parada frente al espejo de cuerpo completo, me mire, no era ni flaca ni gorda, tenía la piel clara y un par de lunares en el hombro derecho, observe mi rostro, no me consideraba bonita, aunque los demás si lo creían, quizá solo veían mis ojos, esos ojos heredados de mi abuela, para mi… la única persona que me quiso, esos ojos verdes. Deje de mirarme y fui al armario saque mi uniforme y me cambie, regrese al espejo y cepille mi cabello, era un tanto ondulado pero no completamente de un tono castaño y rojizo, al terminar tome mi mochila y baje directo a la cocina, tome una manzana y me senté frente a la ventana a esperar el autobús, mire el reloj 7:35 am, vi el autobús acercarse así que tome mi mochila y salí, botando en la basura lo que restaba de la manzana.
La puerta del autobús se abrió…
- Buen día _____(tn) –me dijo sonriente el chofer.
- Buen día –conteste mientras subía.
Había muchos asientos libres pues en el autobús solo había 5 chicos, aun así, decidí por sentarme hasta atrás. Durante el trayecto solo mire por la ventana, no sé porque tenía que ir a la escuela en la mañana… me habría gustado estudiar en la tarde, así, no tendría que escuchar los gritos y repetir la rutina. Al menos así mientras ellos se mataban yo estaría en la escuela… pero desgraciadamente, no era así…
- ¿No vas a bajar? –me pregunto un chico de ojos verdes, sacándome de mis pensamientos.
Yo solo asentí y me levante, el chico dio la vuelta y camino hacia la salida del autobús, yo lo seguí, al salir vi al chico alejarse, yo iba con un paso lento, el día estaba soleado, era de esperarse pues creo que anoche las nubes se habían librado de la lluvia, llegue a la entrada del colegio y me dispuse a ir a mi primera clase, Historia, no era mi clase preferida, ni esa ni ninguna otra, ni siquiera me gustaba la escuela, pero venia solo por no estar en casa, creo que no soy la única que hace eso, aun así llevaba buenas notas, nunca había reprobado y me llamaban una alumna de excelencia… ¿qué de excelente puedo tener yo? La respuesta… nada.
Llegue al aula y entre, los pupitres eran de una pieza, no había nadie, así que solo tome mi lugar de costumbre, hasta el fondo. Tocaron el timbre y el aula comenzó a llenarse de estudiantes, unos minutos más tarde entro el profesor.
- Buen día muchachos –dijo mientras dejaba su portafolio en la mesa.
El profesor comenzó la clase, explicando no sé qué, no puse atención, últimamente se me ha hecho difícil.
Así pasaron tres clases más, y así me pase yo, sin prestar atención. Toco el timbre y me dirigí hacia la cafetería, entrando, me pase directo a una mesa, no tenía hambre, me senté y comencé a observar todo, había una chica sentada dos mesas después de la mía, se pintaba los labios y estaba atenta a su reflejo, había un grupo de chicos hablando en voz alta, y había una pareja besándose cerca de la puerta… clave la mirada en la mesa, ¿ellos de verdad estaban enamorados? Yo me sentí así solo una vez, recuerdo ese día, vi a ese chico de ojos grises caminando por el patio de la escuela, llevaba el cabello rubio alborotado. Pero bueno, eso fue hace ya 5 años atrás, ahora no sabía cómo se sentía y no quería saberlo, yo ya no creo en eso…
- Atención alumnado –escuche la voz del director por las bocinas de la cafetería- se ha tomado este día en suspensión, así que al acabar la hora del receso pueden irse a casa, pasen buen día-
Grandioso, más tiempo en mí pacifica casa, pero bueno, ahora no estaba papá, así que creo que estaría pacifica por un rato, pasaron 5 minutos más y se escuchó el timbre, me levante y camine hacia la salida, no fue un transcurso largo así que salí prontamente de la escuela.
Llegue a casa y abrí la puerta, mi madre estaba en la sala mirando televisión, simplemente me dirigí a mi cuarto, cerré la puerta tome, mi Ipod y me acosté en mi cama, “I Will Be” es lo que comencé a escuchar en cuando lo encendí, solo miraba el techo, buscaba respuesta que claro, se que nunca encontraría, quisiera ser mas fuerte y largarme ahora, pero mas que eso, soy una cobarde…
- ¡_____(tu)! –mi madre entro a mi habitación gritando.
- ¿Que? –me senté en la cama y la mire.
- ¿Qué haces aquí? –me miraba con enojo
- Salí pronto de la escuela
- ¿Ha si? Tan siquiera ten la decencia de avisarle a tu madre
- Aunque te lo hubiera dicho… me hubieras ignorado –estaba enfadada, aun así trate de mantener mi voz calmada.
- ¿Sabes que? Si, tienes razón… estuvo bien que no me hablaras y hubiera sido mejor que no estuvieras aquí a nadie le importas.
- Bueno si no me quieres, ¿porque me tuviste? Me hubieras abortado y me hubieses ahorrado una vida de miseria –comencé a levantar la voz y las lágrimas comenzaron a salir.
- Siempre te haces la victima… estas aquí solo por tu padre, si no, ya te hubieras largado.
- ¡Es lo que mas quiero!
- _____(tn) cariño –suavizo su voz- ¡es mejor que NO hubieras nacido! –Grito esto ultimo.
Ya no pude responder, solo agache la mirada ahogándome en llanto. Ella sin más, se fue.
Juro, juro que cuando cumpla los 18 años me iré, saldré de esta casa. Haré de mi vida lo que me plazca y nunca mas volveré a ver a mi supuesta madre. Dejare este infierno que me acaba día con día. Solo quiero una nueva vida.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario